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El dúo que integran Raúl Tilín Orozco y Fernando Barrientos festejó ante una sala llena "La Ballena Azul" del CCK en esta capital, sus 20 años de trayectoria ininterrumpida entre sus cinco álbumes grabados, y andar por distintos escenarios de Argentina y el mundo.
"Venimos a decirles muchas gracias por estos 20 años de aguante con nosotros y por el cariño que recibimos en todos los lugares donde nos toca actuar. Por eso les decimos muchas gracias y les venimos a regalar un puñado de canciones que nos acompañan, muchas de ellas que nunca habíamos interpretado en vivo", le comentó Tilín al público presente.
De esa forma y combinando con sapiencia los climas entre tonadas, gatos, cuecas y canciones propiamente dichas, fueron creando un clima en el cual la música con concepto fue la gran protagonista.
En la primera parte interpretaron justamente estos temas de los cuales no se conocen en sus conciertos como: "Llegado el tiempo de amar", "Baila el día", "Tiñe praderas", "Del que se va y no vuelve", "Cuando la soledad nos da", "Tranquilo compadre", "Cantas", "Los negritos", y un tributo al recordado cantautor chileno Víctor Jara con "El cigarrito".
"Algunas de estas composiciones las hacemos a veces en las guitarreadas, en las pruebas de sonido y ahora se las mostramos a ustedes que siempre nos acompañan", afirmó Barrientos.
Luego y ya en la última parte del recital, llegaron algunos de los denominados clásicos del dúo que le dio un toque diferente y necesario a la música cuyana, con un sonido muy personal y distinto.
"Pulpa", "Fuera bicho", "Monstruo de barro", "Vidita agua" (recordando que en su disco la entonaron junto a la eterna "Negra" Mercedes Sosa), "Arde el fuego", "Chilenitas", "Tal vez me quede" y el infaltable "himno" del dúo, "Celador de sueños", cantado junto a su gente.
Párrafo aparte se merece la versión sin igual de un himno a la zamba como "La Pomeña" de Leguizamón y Castilla y que participaron durante el concierto como invitados el enorme armoniquista Luis Robinson, la agrupación Usted Señamelo y César Pavón.
Un recital de Orozco Barrientos impecable en el sonido, en el clima y en el contenido de las canciones, noche de festejo en Buenos Aires y que ahora seguramente continuarán por todo el país.