}
Abel Pintos fue el número central en la 66° edición de la Fiesta Nacional del Maní en Hernando, Córdoba. Unos minutos antes de subir al escenario, charló con los medios de prensa y habló de todo.
Fue el primer festival en la agenda “abelera”, que terminará a fines de marzo del 2022. Por eso tan importante para él, pero también porque sabe lo que significa que empiecen a reactivarse estas festividades: “Tengo sensaciones de mucha felicidad al volver a los festivales. Porque la música y los espectáculos empezaron a reactivarse de a poco, pero los festivales estaban en el banco de espera respecto los protocolos sanitarios y de producción. Me pone muy contento que haya llegado el momento de que le toque a los festivales, porque los recitales hacen muy bien a todos, sobre todo al público, pero tienen algo especial porque es la fiesta por lo que se trabaja mucho tiempo y con mucho esfuerzo. Pero además porque sirven para escribir la música y el arte en esa ciudad o pueblo”.
Las transformaciones de Abel
Cada ciudad construye su historia musical a partir de festivales de la misma forma que Abel lo hizo desde su debut, consagración y primeros grandes reconocimientos. Sobre todo, de un público que siempre lo ha visto en cada verano y en cada momento de su vida y que ahora también está a su lado en una etapa muy importante: “Yo hace 25 años empecé a hacer música y era niño cuando pisé un escenario. Mucha gente me acompañó y vio los cambios que experimenté. Primero como persona y que se vieron también en la música. Mientras siga teniendo más preguntas que respuestas para dar, todo lo que exprese a través de mi música se irá resignificado y el público también verá esas trasformaciones”, confesó.
Cuando le preguntaron por esta nueva etapa de su vida, siendo padre recientemente y después de su casamiento contestó: “Tiene un significado especial. Yo nunca sentí tanto impulso de la vida en cada uno de mis días como ahora lo siento. A través de mis sueños, de mi trabajo diario, tanto a nivel individual como familiar, estamos experimentando eso”.
Abel en el show que daría luego de la conferencia dijo estar muy feliz porque si se estaba llevando a cabo esta Fiesta, con tanta gente era “porque estamos pudiendo respirar más tranquilos”. Por eso el tema de la pandemia estuvo presente también en las preguntas y más precisamente en cómo lo afectó artísticamente. “Lo más probable es que tengamos mucho material para hacer cancones después de la pandemia”, dijo. Y continuó: “Yo escribo sobre los momentos o a raíz de las cosas que me conmueven mucho… Y todas las cosas que pasaron durante el momento más duro de la pandemia, más estricto del encierro, fueron muy conmovedoras. En lo personal escribí canciones por lo movilizado que me encontraba frente a temores y expectativas como frente a las alegrías, por todo lo que estaba viviendo desde lo personal”.
Al final de la conferencia Gustavo Bottasso, intendente de Hernando y Marcela Brizuela, coordinadora del Festival, le entregaron una plaqueta recordatoria y productos regionales por ser “una celebridad que nos dice con sus canciones, lo que queremos ser como ciudad, con crecimiento y el desarrollo”. Un desarrollo y crecimiento que Abel lo viene sosteniendo desde hace varios años y que fueron las razones para un show inolvidable, como él también contó en sus redes: con un nivel de cercanía tan grande con su gente en esta nueva etapa de post encierro y la más intensa de su vida.