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La cantante y violinista oriunda de Buenos Aires concluyó un ciclo titulado Música desde casa, donde se pudieron escuchar varios temas, el último junto al grupo La Callejera donde hicieron la versión Rojo Delirio.
Si bien el parate obligó a modificar ciertas rutinas, Natalí Giffi aprovechó los momentos para trabajar en lo que será su nuevo disco, el cuál contará con canciones de su autoría, además deja abierto un interrogante sobre una posible presentación virtual.
Natalí, que fue nominada con segundo disco Ojalá a los Premios Gardel como “Mejor álbum artista femenino de folklore” en 2017, ha compartido escenario con varios artistas, y el año pasado Peteco Carabajal, la convocó para formar parte del grupo Riendas Libres, en el Festival Nacional de Folklore de Cosquín.
¿Qué te dejó el ciclo Música desde casa?
En principio nació para compartir con los músicos que me acompañan, empecé en marzo y como cierre convocamos a La Callejera Folklórica ya que tengo buena relación con Ariel Chaco Andrada, y me sentí privilegiada de poder reversionar con ellos Rojo Delirio que es una chacarera de Ariel, y contenta porque funcionó cómo un broche de oro.
¿Cómo te trató el confinamiento?
Lo que más se extraña además del contacto con los músicos es con el público, nosotros somos de estar en peñas y festivales, además tenemos una relación también con el bailarín y esa energía que se genera se extraña, deseando volver pero mientras tanto tomándolo con una actitud positiva, buscándole la vuelta, y empezamos a trabajar en un nuevo disco porque la idea es que sean canciones propias.
Al hablar de canciones propias, ¿en qué se basa un artista para componer? Y ¿qué nos podés adelantar?
Sonoramente fui encontrando mi identidad con el violín y la banda que me acompaña, encontramos un sonido característico que no es algo que sea fácil y que requiere de mucho tiempo, y ahora el desafío es plasmar mensajes propios a través de las letras, de manera transparente para llegar a la gente, estoy compartiendo las composiciones con la música de Emi Cabrera, con el que tengo una conexión muy buena para trabajar y creo que va a salir un hermoso resultado, sacando canciones de a una por las plataformas digitales y si todo sale bien con invitados también.
¿Cómo venía este año proyectado?
Teníamos planes de gira, había una confirmada por el norte, también una fecha para la presentación del disco en el Teatro Monteviejo.
¿Tenés pensado hacer un streaming?
Sinceramente lo estamos analizando, todavía no hay nada confirmado pero hay una posibilidad, en relación a lo que me preguntaste antes aproveché para interactuar en las redes, y eso fue algo que favoreció porque al estar viajando no se puede hacer, pero sería lindo coronarlo con un show en vivo.
¿Cómo llega el folklore a tu vida?
Llega con esa camada de artistas de los ’90, Soledad, Luciano Pereyra, Los Nocheros, y con mi grupo de amigos formamos un grupo de folklore haciendo los éxitos de ellos, y de ahí nunca más se fue, cuando terminé el colegió continué mi carrera solista y mi primer productor me ayudó a profundizar en el folklore con el Chango Nieto, Las Voces de Orán, donde se hacía notorio el violín y a partir de ahí comencé con el violín el cuál requirió mucho estudio para que suene bien, después llegó Peteco Carabajal con el cual me identifiqué mucho con su forma de tocar, bien sachera.
¿Qué lugar te sorprendió que te hayan convocado?
Este año tuve la oportunidad de tocar en el festival Selva Portal de NOA, en Santiago del Estero, con un público muy cálido, con una buena respuesta de la gente y es un lugar que recuerdo con mucho cariño.