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Tal como nos tiene acostumbrados en cada una de sus presentaciones el cantor popular Jairo desplegó un concierto impecable, emotivo y de alto nivel artístico combinando composiciones clásicas, otras que hace tiempo no interpretaba y también nuevas, todas en un marco de gran respuesta de su fiel público, dentro del ciclo de recitales FestiBal Otoño 19 por el que ya pasaron artistas de la talla de Los Alonsitos, Mario Bofill, Teresa Parodi, María Graña, Nano Stern, Esteban Morgado, María Graña y Ofrenda Musical a Jaime Torres.
Previo al inicio del recital de Jairo bien secundado como es habitual por su seleccionado de músicos que lo acompañan, hizo su presentación por primera vez en el Opera el multiinstrumentista tucumano Manu Sija quien solo en el escenario hizo un set de canciones propias, acompañándose en distintos momentos por el violín, la batería, la guitarra, los teclados y su voz.
Y ya en el inicio del plato fuerte de la velada hizo su aparición en escena Jairo con su imponente figura y exquisita voz con composiciones de la talla de "Me basta con saber", "José el carpintero", "Corto Maltese", "Los poetas no se rinden" y un tributo a la figura del recordado cantautor y poeta Sebastián Monk, con el poema "Si es posible".
Sin interrupciones interpretó un popurrí de viejas composiciones pero actuales en su voz que integran su variado repertorio como "Me verás llegar", "Amigos míos me enamoré", "El valle y el volcán", "Yo te invito bailarina" y "Nuestro amor será un himno" para la ovación cerrada de los presentes.
Continuó sin interrupciones con "Los enamorados", un sentido homenaje a la figura del enorme cantante francés fallecido hace algunos meses a los 95 años Charles Aznavour de quien contó sus anécdotas vividas en Francia y cantó "Viví" y junto a su hijo Yaco González, una personal versión de "La boheme".
Siempre recordando etapas de su vida de compartir muchas piezas con el inolvidable e irrepetible poeta cordobés Daniel Salzano, interpretó "La cárcel de la pena", "Balacera", "Milagro en el Bar Unión" y el infaltable y reconocido "Ferroviario", para seguir con "Toda la noche contigo" y "Vivir enamorado".
Casi llegando al final del impecable concierto Jairo a capella entonó la canción "El titere" con letra de Jorge Luis Borges y musica del genial Astor Piazzolla con quien le unia una larga amistad.
Los bises que nunca faltan llegaron con la genialidad de "Antiguo dueño de las flechas" y su eterna versión del "Ave María", logrando el aplauso y la admiración del público de pie que lo despidió con el cariño de siempre.
Junto a su hijo Yaco González en percusión y coros, lo secundador un seleccionado de maestros comandados por los arreglos, la dirección musical y el piano de Guillermo Cardozo Ocampo (hijo del recordado Oscar Cardozo Ocampo), Daniel Ferrón en bajo y coros, Javier Acevedo en acordeón, Gustavo Horche en batería y Osvaldo Figueras en guitarra.
Con emoción en sus palabras Jairo le dedicó su concierto a la productora y jefa de prensa en varias etapas de su carrera presente en la sala Marta Tedeschi quien cumplía sus jóvenes 90 años.
Jairo volvió a demostrar, si era necesario hacerlo, su permanente vigencia y la actualidad permanente de sus composiciones en un repertorio coherente y repleto de climas a lo largo de la inolvidable velada.