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Mario Bofill se presentó en el ND Ateneo el sábado 23 y el domingo 24 de octubre diciendo que contaría en sus canciones historias de su pueblo natal, Loreto del departamento de San Miguel, a 200 kilómetros de la capital de la provincia de Corrientes.
A lo largo del recital, repasó etapas de su vida , que bien podría ser la de cualquiera de los espectadores que colmaban el teatro: el amor los hijos , la distancia , la vejez, la muerte...el humor y la emoción a lo largo de dos horas de espectáculo.
Así es Mario Bofill. Este cantautor se inició en el año 1964 junto a su hermano con el conjunto Los Hermanos Bofill y hoy, además de ser referente de la música del litoral , ha dejado a lo largo de su carrera más de 200 canciones grabadas por otros músicos como Terea Parodi, Ramona Galarza y Maria Ofelia.
La excusa para la presentación en Buenos Aires fue el lanzamiento de su nuevo trabajo discográfico, Duendes Puebleros, en el que repasa como es su costumbre, historias de vida.
No faltaron clásicos de su discografía como “Viva la pepa”, “Cantalicio”, “Conjunto Pena y Olvido”, “Los dos viejitos” y otros tradicionales de la música del litoral como “El Toro”.
El público fue su cómplice en todo momento, a tal punto de transformar la sala del teatro en una gran peña litoraleña, en la que el artista parece ser pariente y amigo de todos y en la que no estuvo ausente el grito del sapucay.
Las imágenes de los videos: “Cantalicio vendió su acordeón” y “Yo que te Quiero Tanto” dividieron el concierto en dos partes, con un intervalo en el que los humoristas Emilio Karoty y Jorge López de Simoni pusieron la cuota de humor.
Acompañaron a Bofill dos excelentes músicos: Roberto Romero en acordeón y teclados y Pedro Pablo Gómez en acordeón
Alguien dijo alguna vez: “pinta tu aldea y pintarás el mundo”. Quizá esa frase resuma al músico que guarda dentro de Bofill un gran contador de historias que son tan suyas como de todos.