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Todas tienen la misma sensación: él las está mirando. Ellas son como “Las nenas”, de “El gitano”, Roberto Sánchez. Pero hoy, quien las mira no es Sandro –que sembró su legado antes de partir- sino Jorge Rojas.
Él, que carga una de las mejores voces de la música popular, tiene además al público en la palma de su mano y por su vuelco innegable a las canciones románticas, tiene toda una troup de chicas que lo siguen literalmente a todas partes.
El miércoles, desde mediados de la tarde, podía verse a sus fans rodeando al Teatro Colonial de Avellaneda. Es que Jorge grababa ese día un especial para Crónica TV, con entrada gratuita y por orden de llegada.
Algunas afortunadas ocasionales, presenciaron la prueba de sonido desde la primera fila y comentaban entre sí: “Vine desde Moreno, estoy desde las cuatro de la tarde acá y para volver tengo que tomarme varias cosas, pero no me importa”, decía emocionada una joven salteña que inquiría curiosa a las demás y les preguntaba por su nivel de fanatismo.
“Yo vine desde Bariloche a hacer trámites y ni bien me enteré no quise perdérmelo”, dijo otra de las más cercanas al escenario. Entre las butacas del Teatro también se acomodó el compositor tucumano Matías Casasola que, radicado en el Barrio de Palermo, aprovechó la ocasión para ver a uno de sus referentes.
Pasadas las ocho de la noche, la espera terminó con los primeros acordes de “Vuelvo”, todos los presentes cantaron la letra de principio a fin, hasta que Rojas agradeció la posibilidad de mostrar “Aniversario” en la sala ubicada al sur del Gran Buenos Aires. Con esta placa, Rojas celebra los casi once años de carrera solista que sus seguidores transitarán en vivo el 14, 15 y 16 de Octubre, cuando él suba nuevamente a las tablas del Gran Rex.
En un show cálido donde Rojas se dedicó a hacer aquello que sabe: cantar y seducir, hubo espacio para diferentes temas como “Lo que el tiempo me enseñó”, “La vida” o “No te vayas carnaval”, entre otros.
La noche tuvo además, a una invitada muy especial: la compositora colombiana María Isabel Saavedra que entonó “Me borrarás” entre los elogios de Jorge y los aplausos del público.
Sucedió también la clásica “movida de colita”: las fanáticas piden y él complace, al tiempo que genera halagos también clásicos como “que lo tiran a la hinchada” o “qué lindo que sos”. Él sonríe y juega con sus seguidoras, aunque el juego más importante sea el de la música.
El concierto, de casi dos horas se cerró con justamente con “El juego del amor” y con “Mía” fuera de programa. La prueba del cariño incondicional entre el cantor y su público se verá en breve por Crónica TV. Mientras el artista gira, agotando entradas, por todo el país.