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Notas
CRÓNICA EXCLUSIVA


22/10/2015

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RECORDAR


El viernes 16 de octubre quedará en la memoria de muchos, y más aún en los privilegiados que fueron testigos de la primera presentación de Paralelo 31 - Orquesta de Música Argentina, en el Centro Cultural Córdoba. Porque esta orquesta conformada exclusivamente por músicos cordobeses, nos regaló una de las mejores noches de los últimos tiempos en La Docta.

Pasadas las 21 hs, el Centro Cultural Córdoba se disponía a ver por primera vez a la orquesta con más tonada de todas. Músicos y compositores cordobeses, o quienes se formaron en la Provincia, la armaron como una forma de despuntar el vicio. Todos con muchos proyectos, se dieron el gusto de poder juntarse y demostrar sus virtuosismos. “Poner en valor la enorme riqueza del acervo musical argentino en el campo instrumental” era la presentación previa en algunos medios de Córdoba. Pero a medida que fueron versionando a diferentes autores, o que fueron tocando las obras especialmente hechas para ellos, todo lo escrito y lo dicho era poco.

Bajo la dirección de Luis Pérez, todos - de elegante negro-  fueron subiendo al escenario. Todos son: Mauro Ciavattini: vientos andinos, flauta, saxo soprano y alto; Sebastián Vallejo: oboe, corno inglés y quena; Nicolás Mazza: clarinete, clarinete bajo y saxo tenor que como los definió el mismo director se convertirían en una especie de delantera de la orquesta. Guillermo Ré: charango, guitarra, ronroco y vientos andinos;  Román Carballo: guitarra; Alejandro Arneri: guitarra y guitarrón y Máximo Endrek en contrabajo, eran los responsables de las cuerdas. Pablo Jaurena en bandoneón, Pablo Rocchietti en el piano, Esteban Gutiérrez en la percusión y Diego Clark percusión y voz – o mejor dicho el músico que toca lo que venga- conformaban esta especie de selección. Con estos nombres, nada podría salir mal.

EL SHOW
Parecía que era una zapada entre amigos y familias. Si eso pasaba en un salón, nadie hubiese notado la diferencia. Desde el comienzo, Luis Pérez mostró que la solemnidad estaba en los instrumentos. Yendo a buscar los lentes que se había olvidado, robó las primeras risas de la noche. Es que Luis es todo un personaje. O es el Director de Orquesta, más auténtico que se haya visto. Moviéndose al ritmo de cada tema, como si estuviese en una peña. Disfrutando como todos, de cada momento de la noche.

Yo no sé qué magia tienen la música… Cómo logra conmover. Como viaja por el cuerpo y llega al alma, pensaba, cuando sin aviso comenzaron a tocar Salir al ruedo,  de Guillo Espel. El nombre era ideal para este momento. Ellos así, con semejante presentación salían al ruedo. Salían al encuentro de todos los que llenaron el auditorio.

“Todo esto es estreno para nosotros” comentaba Pérez mientras presentaba temas como Ya está, un “Latin Huayno” de Gerardo Di Giusto, La flor del lapacho/ canción de cuna (melodía del pueblo Qom)  con  arreglo de Nico Mazza o De Formosa a Córdoba  chacarera de Jorge Martínez, el pianista del Trío MJC.


Pablo Jaurena se compenetra. Por momentos parece que estuviera leyendo un diario de un compañero de colectivo, cuando sigue la partitura. Pero cuando la vara lo señala, se concentra y su amigo bandoneón suena, y cuando eso pasa nadie se mueve. La emoción se apropia de todos. Que si no humedecemos los ojos, explotamos las manos. Aplaudir cada tema como si fuera el último es lo mínimo que se puede hacer, cuando se los ve emocionados a ellos. Cuando se está en la primera fila y se puede notar como Mauro Ciavattini se compenetra y entre que toca se mueve en la silla bailando. Es que si al lado está Rochietti con el piano y atrás están las guitarras y la percusión que se miran y así se hablan, entienden… y generan todo esto,  la chacarera se va a querer bailar, más que “sonar”.

Todos bromean. Se hacen chistes entre ellos, como olvidándose de la cita… pareciera. Y parece otra broma cuando el director explica que todo eso que suena, “lo ensayó cada uno por su cuenta”, y tan solo un día antes se juntaron a practicarlo en conjunto. ¡Un día antes! De ahora en más si lo que se escuchaba era hermoso, será diez veces más. Y retumbarán con más fuerza las palabras de Agostina, que decía: “Qué genios son”.

ENTENDIENDO LA MÁGIA
El viernes a la mañana, Luis había estado con Víctor Pintos en la radio. Allí pedía que la noche llegara cuanto antes. Sospecho que a la noche, como en todos nosotros, el deseo cambiaba de forma: Que el show no terminara más. También le pasaba eso a Alexis Galfré, quien compuso Katmandú y no solo recibía música sino el aplauso de todos.

Fresco de mañana,  una milonga de Pablo Jaurena y Damián Torres o Gatito 'e la fiesta con arreglo de Héctor Tortosa continuaron la lista. Sonido muy argento, con arreglos originales dan al Paralelo una originalidad –permítanme la redundancia- un asombro, para explicar que la música de raíz se reinventa, se actualiza y no pierde magia. Y más si de golpe se puede lograr música con un resortero, una garrahand, una garrafa calada que reproduce distintas notas, una llanta con un resorte, un caño azul de aluminio calado, entre otras cosas. Pero hay que tener la habilidad de Diego Clark, claro está.

Milombe de Gerardo Schiavón, Corralera con arreglos de Carballo/Pérez y La juguetona  de los Hermanos Ábalos con arreglo de Nico Mazza fueron cerrando la lista. Una lista que se abrió luego de un debate corto para saber qué tema tocar “porque no hay más” en propias palabras de los integrantes, por lo nuevo y por lo difícil que resultan tocar algunas obras. La flor del lapacho/ canción de cuna volvió a sonar por la conmoción que logran esos temas. Con el coro de Clark, que es lo único vocalmente que se escuchará. Pero cuando parecía que todo estaba visto y escuchado, sonó un cuarteto. Sí, un cuarteto excelente (entre el Chango Rodríguez y Leonor Manzano)  en el aire y en los cuerpos. Inclusive del director, que no debe ser muy adepto a eso, pero sabe que estando en Córdoba a todos nos pasa el Paralelo 31 geográficamente. Y por eso el nombre de la orquesta, otra manera de traspasarnos. Mucho más profundo, musicalmente…

Al final de la noche, de nuevo el pensamiento. Yo no sé qué magia tienen la música… Cómo logra conmover. Como viaja por el cuerpo y llega al alma. Pero sí sé que ellos han sido los culpables.


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