Marcos Basílico, Lucas Ceraso, Juan Manuel Quiroga y Ariel De Avelenda obsequiaron un atractivo espectáculo el pasado viernes 27 de septiembre en Peña Los Cardones, de Palermo. El conjunto, formado por estos jóvenes músicos oriundos de distintas localidades de la provincia de Santa Fe, visitó la capital porteña para compartir las canciones de su primer material discográfico Amuleto; y aprovecharon la ocasión para adelantar algunos temas que formarán parte de su próximo álbum.
Alrededor de las 23 horas, el ballet abrió la velada folklórica del viernes bailando al compás de un hermoso repertorio en el que pudieron apreciarse "Chacarera del violín", y "El escondido", entre otros.
De inmediato, subió al escenario el dúo salteño TucanyChaya que presentó temas de su flamante disco homónimo. El dueto, conformado por Luis "Tucan" Peretti y Ramón "Chaya" Barrionuevo, ex Grupo Savia y ex Vale Cuatro, respectivamente; ofrecieron un inicio a pura chacarera y siguieron con "Ansiedad" y "Río rebelde". Acompañados por las palmas del público continuaron con "La desdichada", de Roberto Ternán y Cuti Carabajal; y "Zamba de Angastaco". El cierre estuvo a cargo de un huayno de su autoría llamado "Con vos", "Zamba para olvidar" y "Amores que matan".
Luego fue el turno de Norte en el Alma, formado por Facundo Bayón y Gustavo Ochoa que, junto a Patricia Valentinetti en el bombo legüero, dieron comienzo a su actuación con la zamba "De Alberdi" y la chacarera "La baguala". Para "La Solís Pizarro" invitaron a Enzo Corvalán, del grupo El Rastro; y a pedido del público, ofrecieron la clásica "Luna tucumana". Precediendo al final de la presentación de Norte en el Alma, Enrique Ojeda y Carlos de Los Troperos de Salta fueron invitados para entonar "Yo soy de allá" y "Largos caminos me iré".
Finalmente llegó el momento más esperado de la noche en el que una vez más el conjunto santafesino acercó su música a una peña porteña. Junto a Alejo Álvarez Quiroga, quien los acompañó marcando el ritmo con el bombo legüero, plasmaron su bellísima impronta vocal en la zamba "Piedra y camino", de Atahualpa Yupanqui.
Con este atractivo comienzo, Maité ya se había ganado al público que los acompañó a lo largo de la función con gran entusiasmo y respeto. "Zamba para olvidar" y "Si llega a ser tucumana" completaron esta seguidilla de canciones pertenecientes a uno de los estilos más románticos del folklore argentino.
La selección de temas continuó con "Hoy", reflejando la influencia latinoamericana que completa el estilo musical del conjunto. Tras un hermoso tema que evocaba el paisaje santafesino, la gran "Chacarera para mi vuelta" invitó a bailar a los presentes que se animaron a danzar al compás de su enérgica melodía.
Más tarde fue el turno de "La sin corazón" y de "La ingrata", chacarera perteneciente a Marcos Basílico y a Lucas Ceraso. Los jóvenes músicos acercaron en esta oportunidad nuevas versiones de sus temas, en los que jugaron más aún con sus voces ofreciendo hermosos matices y luciéndose sin medida en el final de cada canción.
Rondando la despedida llegó el momento de cantar "Amuleto", que dio nombre a su primer disco de estudio. Este alegre tema que alentó a los presentes a acompañar con palmas, precedió a la dulce canción "Eterna en mí", con letra y música de Marcos Basílico.
Para el cierre de la presentación, el conjunto brindó un festivo desenlace con "Sin compromiso", de Lucas Ceraso, y "El avenido". Sin embargo, el público seguía aclamando su música por lo que decidieron extender su presencia con "Un amor como el mío", otro tema de autoría propia incluído en el primer disco.
Ovacionados por el público, que quedó muy agradecido con su presentación, los chicos de Maité prometieron volver a Buenos Aires y, en esta oportunidad, con el disco nuevo en mano.