}
El salteño Eduardo "Polo" Román, integrante de Los Chalchaleros, se presentó el sábado 6 de octubre desde las 21 en el ND Teatro en formato solista en un concierto que, por su estirpe "tradicionalista" y "nativista", recordó la estética del histórico conjunto. Con total vigencia tuvo de invitados a Hugo Varela, Dino Saluzzi y Jairo.
El cantante de 75 años estuvo acompañado por el bombo y la guitarra del rosarino Pablo Olmedo (toca como nadie, acompañó muy bien en acordes, nada de rasgueo) en una puesta esencialmente tradicionalista; y los 54 años de vida del histórico conjunto (1948-2002) -integrado en su primera formación por Víctor Zambrano, Carlos Franco Sosa, Aldo Saravia y Juan Carlos Saravia- fueron parte central del espectáculo.
Detrás de ese clima, el repertorio comprendió clásicos como "La nochera", "Santafesino de veras", "Zamba por vos", “Oración del remanso”, "Me gusta Jujuy cuando llueve", "Alma de nogal", "Luna Cautiva" y, por supuesto, "La López Pereyra". Fue una selección de canciones de todas las épocas.
"Polo" Román, oriundo de Cafayate, integró Los Puesteros de Yatasto junto con su hermano Mario; y en los 60 se sumó a Los Chalchaleros como bombisto y segunda voz. Después de más de 7.000 presentaciones con aquel emblemático conjunto, se lanza a la actividad como solista con más protagonismo y una historia artística inmensa sobre sus espaldas. Así, a lo largo del show se fue animando a darle al público música, anécdotas, historias con esas canciones tan decidoras, que casi podrían describir su vida:“De nuevo estoy de vuelta, después de larga ausencia…Y traigo mil canciones…”.
Polo, vestido de look campestre, camisa blanca y traba al cuello, se mostró nuevamente feliz sobre el escenario y en cada historia, anécdota y canción estuvo presente el espíritu Chalchalero porque fueron más de 40 años juntos, compartiendo canciones y vivencias en armonía.
"Tuvimos una convivencia tremenda con Los Chalchaleros porque nunca tuvimos una discusión", dijo. Y destacó a Juan Carlos Saravia como "líder natural " del grupo. "Con 'el Gordo' Saravia nos sentábamos a comer y me decía las cosas que le parecían que estaban mal, pero nunca tuvimos una bronca, nada. Yo respeté mucho lo que 'el Gordo' decía", dijo en el ND.
Polo recordó que Saravia siempre hacía hincapié en el conjunto que la importancia de la conducta personal de cada uno de ellos fuera de los escenarios.
"El Gordo nos decía, vos sos un Chalchalero y si hacés algo malo no van a decir fue Polo Román, van a decir fueron Los Chalchaleros", recordó el bombista del grupo salteño.
Siempre cantando de segunda voz, ahora en su rol de primera, logró un show muy ameno que tuvo su momento de máxima emoción cuando invitó a Jairo. El teatro repleto se puso de pie para ovacionar a estos dos grandes que lucían sobre esa escenografía despojada.
Así, Polo salió a mostrar de qué va su propuesta modelo 2012 ante un ND Teatro que le tributó una ovación interminable, tras dos horas de música; y nada más que música, que no fue poco. A esta altura, insistir en su capacidad para hacerse cargo del bombo es un lugar común. En cada repiqueteo se escuchaba el “¡¡grande Polo!!”, solo por elegir algunos de los gritos. Fue un camino en busca de la belleza con su voz prolija y sin desbordes, que transmite más ahora que antes. Fin del recital. Por ahora...