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“Sería de Dios encontrar en las calles una banda ancha de humor... un humor para todos, un pueblo con buen humor...”
La frase con la cual concluye el texto que se entrega con los programas resume el espíritu de la obra Doña Jovita Banda Ancha. Humor con buen gusto, ese que nos deja a todos con el corazón calentito de buena onda.
Los elementos son los siguientes:
La escena
Las ruinas de una vieja casa en la serranía cordobesa; un mostrador; mate y termo; una guitarra.... un telón como cielo al fondo.
El personaje
Doña Jovita, una entrañable abuela que vive en las sierras cordobesas y que no sólo nos hace recordar a nuestros abuelos sino que nos hace caer en la cuenta de que el pasado nunca muere en la piel de nuestros mayores. Durante un poco mas de 1 hora 40 minutos la Jovita rememora en las ruinas de la vieja casa familiar a su madre, su padre, sus hermanos y hasta a la tía Hurmilda, que se murió y resucitó para vivir muchos años más y darle a Jovita miles de anécdotas graciosas para relatar sobre ella.
Recuerda como dormían los 14 hermanos en una habitación de dos metros cuadrados, el horno de barro y su creación; y enlazada a la canción “La Jarana”, que canta junto a sus nietos y una vieja guitarra, aterriza en los tiempos actuales, las comunicaciones, la tecnología y hasta la DGI.
Se permite un lugar para la emoción y la risa de sí misma cuando hace “caminar” el mate por el mostrador (un truco de escena) o cuando habla con el público a raíz de algún gag del que sale un comentario, o alguna risa de la gente que le resulta curiosa y hasta juega un partido de ping pong con un pollo de goma devenido en pelota.
La acompañan sus nietos, Rodrigo y El Churli, el primero en el relato y la charla y el segundo en la guitarra y los chistes.
Doña Jovita es parte de todos a lo cinco minutos de comenzar y nos deja meditando sobre la vida en el final de la obra.
El actor
José Luis Serrano recrea este personaje desde hace 20 años, sin malas palabras, sin agresiones y sin frases de mal gusto, con un humor que sin la necesidad de ser intelectual, pega en la gente con sus ocurrencias, sus improvisaciones y su acento provinciano.
Su mejor creación son los tics de una anciana a la que el paso del tiempo (indefinido, nunca sabremos cuantos años tiene la Jovita) no solo le trae falta de memoria y situaciones graciosas propias del despiste sino también la desventuras de la adaptación a lo actual.
Lo acompañan otros dos actores cordobeses: Rodrigo Funes y Churli Corroza, (que además como cantores no tienen desperdicio).
Doña Jovita Banda Ancha Jarana 2005 ya caminó por escenarios de España, por supuesto Córdoba y la Patagonia a sala llena (“La semana pasada en el sur le ganamos a Diego Maradona” decía el actor al final de la obra, explicando que en una de las funciones llenaron la sala el día y a la hora que debutó “El 10” en televisión) y llegó a Buenos Aires metiéndose en el bolsillo al público porteño.
Una frase de la periodista cordobesa Norma Morandini termina de convencernos: "En tiempos de falsificación, ella es un soplo profundo de verdad...”