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Notas
CRÓNICA EXCLUSIVA


25/08/2011

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RECORDAR


La noche del sábado 20 de Agosto, la talentosa cantautora Mariel Trimaglio adelantó los temas de su tercer CD con un marcado cambio de estilo, y recordó parte de su anterior trabajo Géminis. Rodeada de afecto y un cálido público, La Trastienda fue testigo del encuentro consigo misma en este giro musical. 

Reinaba la expectativa de ambas partes. Mariel estaba ansiosa por saber cómo tomaría la gente este cambio en su música, a la vez que, debido a lo adelantado a la prensa, el público estaba expectante por conocer lo nuevo.

Los instrumentos comenzaron a sonar,  en el escenario aparecieron los músicos y luego la cantante de la noche. Todos con una imagen que reflejaba también un cambio. El repertorio comenzó a desarrollarse con “Detalles”, “Te mentiría”, “Se me olvidó”, “No pretendo”, “Hasta que vuelvas conmigo”, “Aunque no estás” y “No te pido flores”. Todo esto amenizado por el diálogo que calmaba un poco la tensión lógica del encuentro, a la vez que generaba un clima de confianza entre la artista y sus seguidores.

Mariel, además de cantar estupendamente, acompañó con guitarra y charango en varias oportunidades. La secundaron también sus excelentes músicos: Carlos Minella en guitarra eléctrica y coros, Santiago Lucero en guitarras y coros, Damián Gómez en batería, Danilo Cernotto en piano, teclados y acordeón, Cesar Batistela en bajo eléctrico y Franco Bonacci en percusión; quienes, como no podía ser de otra manera, tuvieron su momento de lucimiento al ejecutar un tema instrumental muy aplaudido en la sala. Seguido por “Miénteme” y “Puedo jurarlo”, hecho por toda la banda.

Su familia también se encontraba allí, prestando su apoyo incondicional, como lo han hecho desde el principio de su carrera, por lo que solicitó que sus padres permanecieran adelante para dedicarles una canción. Fue muy oportuno que en vísperas del día del niño, ella cantara “Niña Blancanieves”, tema que habla de la actitud de sobreprotección que los padres, sin darse cuenta, demuestran a sus hijos, motivados por el amor.

Mientras transcurría la velada, en un rincón del salón se encontraba un artista, dibujando y pintando un retrato de la figura central de la noche, que terminó su obra justo a tiempo, antes de cerrar la presentación. Fue sorteado entre los presentes y quien lo ganó se lo llevó con especial agrado.

Ya cerca del final, sonaron los temas “Igual”, “Hoy (En punto muerto)”, “Quien”, “Tan cerca y tan lejos”, seguidos por la ovación de la gente que pedía un tema más. Entonces  con “Puedo” y “Suspiros” se dio por terminada la presentación.

Para sorpresa de todos, surgió desde un ángulo del lugar, el grupo Kimba Candombe, ejecutando “Carnaval de barrios”, quien precedió la salida del lugar con su ritmo de murga, bailando con los concurrentes. Ya en la vereda, la música y el baile continuó por un buen rato debido a que nadie se quería ir.

De esta manera, el pop y los ritmos latinos fueron el centro de la noche, dejando de lado los temas folklóricos que con su privilegiada voz, la destacaron en su carrera, y abriendo ahora camino para una nueva y exitosa etapa.


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